Debido al material empleado y a la localización de las obras, se detectó la probabilidad de que en días secos y ventosos se generara una nube de polvo en la planta de machaqueo de árido situada en la zona industrializada de Aboño, aunque ésta no afectaría a las áreas urbanas cercanas.

En concreto, estas emisiones de polvo proceden de la fase de machaqueo y del posterior cribado de material calizo.

Se realizaron diversas actuaciones encaminadas a la minimización de las emisiones de polvo.

En primer lugar, se carenaron las cintas transportadoras y cribadoras de árido.

También se instaló un sistema para la supresión de polvo mediante niebla seca. Este sistema consigue adherir las partículas de polvo existentes en el aire a unas gotitas de agua hasta que aquellas adquieren el sufi ciente peso para precipitar por gravedad a la corriente general de proceso. A diferencia de otros sistemas de rociado, el sistema implantado en esta obra necesita muy poca cantidad de agua y no moja el material, sino sólo el polvo, siendo por otra parte innecesario el uso de aditivos y sustancias químicas. La razón por la cual el sistema es tan efi ciente es debido a la capacidad de generar partículas de agua del tamaño de unas micras, tamaño similar a las partículas de polvo que tratamos de eliminar.

Por último, se reforzaron los sistemas de humectación en los fi nales de cinta correspondientes al cono intermedio y a la arena, mediante la colocación de varios difusores de agua que complementan a los del sistema DSI. En la cinta de la arena, con el objeto de optimizar la humectación del árido, dichos difusores se protegieron de la acción del viento con un carenado que evita la dispersión de los chorros de agua emitidos.